Vótame +1

Dame tu voto en HispaBloggers!

12 ene 2014

El gran Salón

Domingo 12 Enero 2014

Entrando por la puerta del Salón, mirando para aquí y para allá mientras me dirigía a la barra, eché un vistazo a la hilera de chicas jóvenes esperando que alguien las sacara a bailar. Me fije especialmente en una, mientras todas solo se fijaban en los chicos de la sala ella solo se preocupaba por escuchar la música y mover un poco sus dedos al ritmo de las canciones.
 Mientras me acercaba a esa joven, las demás pedían que las sacara a ellas pero yo ya tenia un objetivo en mente. A unos pasos de estar delante suya no encontré la atención que me esperaba, aquella chica seguía con la cabeza agachada y probablemente no notó mi presencia. No fue hasta que alargue mi mano hacia su rostro cuando por fin levanto la mirada y me miro con los ojos brillantes y regalándome una sonrisa agarró mi mano y se incorporo de la silla. Con su mano agarrada a la mía la llevé al centro del Salón donde se encontraban las demás parejas bailando y sumándonos a ellos empezamos a bailar.
 Mis movimientos eran tímidos y torpes comparados con los de mi dulce acompañante, era una chica con mucha vitalidad, disfrutaba con cada movimiento parecía como si se fundiera con la música, con cada nota que salia del piano, como si su corazón estuviera poseído, bombeando con cada pulso de la melodía. El ritmo se apoderaba de su cuerpo y me transmitía toda su fuerza. Bailamos horas y horas sin parar, varias veces la había susurrado al oído si necesitaba descansar pero ella no quería, su gesto alegre mostraba lo mucho que se divertía y con eso me valía. Tras largas horas bailando, ya era mas de media noche y la mayoría de la gente ya se había ido, ya nadie bailaba, excepto nosotros.
 No se desde cuando pero yo estaba prendido de su cuerpo, no me daba cuenta de cómo corría el tiempo, solo podía pensar en esa chica y escuchar la música que corría por su cuerpo. Los dueños del salón ya nos avisaban que era hora de cerrar, pero nosotros ni nos enteramos, estábamos tan sumergidos en el mundo nuevo que acababa de descubrir, el mundo de la música. El dueño enfadado nos echo del Salón de malas maneras, la chica y yo caímos al suelo fuera en la calle. La miré para asegurarme que no se hubiera echo daño pero sus carcajadas me aseguraron de que no. Ya era muy de noche y la notaba cansada así que me acerque a sus rosadas mejillas para darla un beso pero se alejó, me quede un poco avergonzado pero la sonreí y me quede a ver como se daba media vuelta y se alejaba en el horizonte. La figura de la muchacha desapareció a lo lejos, y justamente después de que me dirigiera en sentido contrario oí la carrera de dos botas viniendo directamente a mi. Era ella, vino, se acercó y me beso la mejilla. Después se acerco a mi oído y me susurro: "mañana nos vemos, gracias"








No hay comentarios:

Publicar un comentario